Tributos de la Iglesia
En España, existen varios «tributos de la Iglesia» que se regulan en el ámbito del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Estos tributos se refieren principalmente a las diferentes formas en las que la Iglesia Católica recibe financiación por parte de sus fieles y del Estado.
Además, la Iglesia Católica también puede percibir otros ingresos por el IRPF, como son las donaciones directas de personas físicas o jurídicas y los legados testamentarios. Estos ingresos están exentos de tributación en el IRPF y en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones.
En definitiva, los «tributos de la Iglesia» en España se basan principalmente en la asignación tributaria, las donaciones y legados, y los beneficios fiscales como Entidad de Utilidad Pública. Estos mecanismos de financiación permiten a la Iglesia Católica mantener su labor pastoral y caritativa en beneficio de la sociedad.