Reparacion y Conservacion Gasto O Activo
Por otro lado, se considera como activo aquellos gastos que implican una mejora o ampliación del bien, que aumentan su vida útil, calidad o rendimiento, y en consecuencia, su valor. Ejemplos de gastos que se consideran activos son la construcción de una nueva habitación en una vivienda o la instalación de un sistema de aire acondicionado.
En resumen, la diferenciación entre gastos de reparación y conservación y gastos de inversión permite al contribuyente deducir ciertos gastos en su declaración de IRPF y tener un beneficio fiscal en el corto plazo, mientras que los gastos de inversión se amortizan y tienen un beneficio fiscal en el largo plazo. Por lo tanto, es importante tener en cuenta las diferentes categorías de gastos al realizar la declaración de IRPF para poder optimizar la carga fiscal.