rendimienatos de capital inmobiliario negativo
En el IRPF español, los rendimientos de capital inmobiliario negativo se pueden compensar con los rendimientos positivos de la misma naturaleza obtenidos en el mismo ejercicio o en los cuatro años siguientes. Además, si se trata de una vivienda habitual, los gastos financieros asociados a la misma se pueden deducir en la declaración de la renta, siempre y cuando hayan sido destinados a su adquisición, construcción, rehabilitación o mejora.