La reducción del 100% en el IRPF para alquileres es una medida que se estableció en España en el año 2015 con el fin de fomentar el mercado de alquiler y permitir que los propietarios obtengan una mayor rentabilidad en sus inmuebles. Esta reducción se aplica sobre las rentas obtenidas por el alquiler de una vivienda que se destine a residencia habitual del inquilino.
Otro requisito fundamental para poder aplicar esta reducción del 100% es que el inquilino debe tener una edad comprendida entre 18 y 30 años y sus ingresos anuales no pueden superar los 30.000 euros. Además, el inquilino debe estar dado de alta en la Seguridad Social y tener un contrato laboral en vigor.