NIE DE FALLECIDO
En primer lugar, es importante destacar que el NIE no se transfiere a ningún heredero o familiar. Por lo tanto, una vez que una persona fallece, su NIE queda inactivo y no se puede utilizar. Sin embargo, no es necesario cancelarlo, ya que este trámite se realizará automáticamente por parte de la Dirección General de la Policía.
En resumen, el NIE de una persona fallecida sigue siendo válido para la liquidación de su patrimonio, pero no se puede utilizar para realizar trámites en su nombre. En caso de tener dudas o necesitar asesoramiento sobre cómo proceder con la documentación del fallecido, es recomendable consultar con un experto en asesoramiento fiscal y legal.