ley 30/1992 subsanación defectos
En el ámbito tributario, la subsanación de defectos tiene especial relevancia en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). En este impuesto, la Administración puede requerir al contribuyente para que subsane posibles errores u omisiones en su declaración de impuestos. Esta subsanación debe ser realizada en un plazo determinado, so pena de que la declaración sea considerada nula y se inicien acciones de comprobación e inspección por parte de la Administración.
En definitiva, la ley 30/1992 establece la subsanación de defectos como una herramienta para garantizar la corrección y eficacia de los procedimientos administrativos, tanto en el ámbito general como en el tributario. Su finalidad es lograr que las relaciones entre la Administración y los ciudadanos se desarrollen de forma adecuada y justa, evitando errores y garantizando el cumplimiento de la normativa vigente.