El Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) es un tributo que grava las rentas obtenidas por los contribuyentes residentes en España. Cada comunidad autónoma puede establecer ciertas deducciones en el IRPF para sus residentes, de acuerdo a sus competencias en materia fiscal. En el caso de las Islas Baleares, existen una serie de deducciones autonómicas aplicables en la declaración del IRPF, que han sido establecidas por el gobierno regional para promover determinadas políticas y sectores de la economía local.
Otra deducción importante es la deducción por inversión en empresas de nueva creación en las Islas Baleares. Esta deducción permite a los contribuyentes que inviertan en empresas con sede en la comunidad autónoma, obtener una reducción en el tramo autonómico del IRPF de hasta el 20% de la cantidad invertida, con un máximo de 8.000 euros por año.