imputación de rendimientos del fallecido
Uno de los aspectos más importantes en la tributación de la sucesión hereditaria es la imputación de rendimientos del fallecido. Esto implica que los herederos o legatarios deben declarar en su impuesto sobre la renta los ingresos o beneficios que haya obtenido el fallecido hasta la fecha de su deceso.
La imputación de rendimientos del fallecido tiene en cuenta el periodo temporal en el que se haya producido la sucesión hereditaria. Por ello, si el fallecimiento se produce a mitad de año, solo se tendrán en cuenta los rendimientos generados hasta ese momento.
En resumen, la imputación de rendimientos del fallecido es un aspecto relevante a tener en cuenta en la tributación de la sucesión hereditaria. Es importante que los herederos o legatarios estén informados y cumplan con sus obligaciones fiscales, ya que cualquier omisión o error puede derivar en sanciones por parte de la Administración Tributaria.