La Hacienda española establece una serie de deducciones en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) para aquellos contribuyentes con hijos a su cargo, siendo una de ellas la denominada «Deducción por Hijo a Cargo de 30 Años». Esta deducción está dirigida a aquellos padres o tutores que siguen manteniendo económicamente a sus hijos ya mayores de 25 años, y que aún no alcanzan la independencia económica.
Para poder aplicar esta deducción, es necesario que el hijo a cargo no tenga la condición de discapacitado ni sea titular de una vivienda en propiedad. Además, tanto el contribuyente como el hijo a cargo deben estar empadronados en el mismo domicilio fiscal y ser residentes fiscales en España.