fiscalidad por alquiler en aragon
Para el cálculo del rendimiento neto, se puede optar por el régimen general o el régimen simplificado. En el régimen general, se deducen todos los gastos relacionados con el alquiler y se aplica una reducción del 60% sobre el rendimiento neto obtenido. En el régimen simplificado, se aplica una reducción del 50% sobre los ingresos obtenidos y se consideran deducibles los gastos de conservación y reparación del inmueble, sin necesidad de acreditarlos.
En cuanto a la retención del IRPF, el inquilino está obligado a practicar una retención del 19% sobre el importe del alquiler y a ingresarlo en Hacienda en nombre del arrendador. Además, es necesario presentar trimestralmente el modelo 115, donde constarán los importes retenidos y las cantidades ingresadas.