estar al corriente en el cumplimiento de sus obligaciones tributarias con el Estado
Además del IRPF, existen otros impuestos que deben ser cumplidos por los contribuyentes, como el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), que grava el consumo de bienes y servicios, y el Impuesto sobre Sociedades, que se aplica a las empresas y organizaciones.
En caso de no cumplir con estas obligaciones tributarias, pueden imponerse sanciones y recargos por parte de Hacienda, así como incluso iniciar un proceso de embargo de bienes en caso de no pagar los impuestos correspondientes.