El ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) es una medida adoptada por muchas empresas españolas durante la crisis económica de 2008 que permite suspender temporalmente los contratos de trabajo o reducir las jornadas laborales de los empleados. A raíz de la crisis del COVID-19, el gobierno español ha vuelto a establecer esta herramienta para ayudar a las empresas afectadas por la crisis a mantener parte de su plantilla.
Sin embargo, en el caso de los trabajadores cuya jornada laboral se vea reducida, solo se someterá a tributación la parte de la prestación que supere el 50% del salario que dejó de percibir. Además, para aquellos trabajadores que se encuentren en situación de desempleo total, la prestación recibida estará exenta hasta un máximo de 180 días.