En el contexto del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) de España, el rendimiento del capital mobiliario se refiere a los ingresos obtenidos por la inversión en diferentes instrumentos financieros, como acciones, bonos, fondos de inversión, entre otros. Una de las formas en las que se pueden obtener estos rendimientos es a través de la inversión en sociedades de inversión de capital variable (SICAV), que son vehículos de inversión colectiva similares a los fondos de inversión.
Para poder aplicar esta reducción, es necesario que las sociedades de inversión cumplan con una serie de requisitos establecidos por la ley, como tener al menos cien accionistas y un capital social mínimo de 2,4 millones de euros. Además, los accionistas deben mantener sus acciones por un periodo mínimo de un año para poder beneficiarse de la reducción.