desgravar que estoy de alquiler
Entre los gastos que pueden desgravarse se encuentran el importe del alquiler, el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), los gastos comunitarios y los gastos de formalización del contrato de alquiler (por ejemplo, los honorarios del notario). Por otro lado, también se pueden incluir los gastos derivados de posibles obras de mejora y conservación en la vivienda, siempre y cuando éstas hayan sido pactadas con el propietario y estén debidamente justificadas.