degrava la compra de audifonos
– La persona que realice la compra de los audífonos debe ser titular del derecho de disfrute de la deducción. Es decir, el beneficiario debe ser el propio contribuyente y no otra persona.
– Debe existir una prescripción médica que acredite la necesidad de la adquisición de los audífonos.
En cuanto al importe de esta deducción, la ley establece que el límite máximo deducible será de 500 euros por cada contribuyente en el ejercicio fiscal correspondiente. Además, para poder aplicar la deducción, es necesario incluir los gastos en la casilla destinada a “diferentes inversiones” en la declaración de la renta.
En resumen, la compra de audífonos puede ser una deducción fiscal a tener en cuenta para aquellos contribuyentes que cumplan los requisitos establecidos, ya que permite reducir la cantidad a pagar en la declaración de la renta y puede suponer un importante beneficio económico para las personas con problemas de audición.