Una de las formas más comunes de ahorrar dinero en el IRPF en relación a los seguros de vida es a través de la utilización de productos específicos como los planes de pensiones. Estos planes permiten deducir hasta un porcentaje determinado de las aportaciones anuales realizadas en la base imponible del IRPF, lo cual supone un ahorro fiscal importante. No obstante, es importante tener en cuenta que los planes de pensiones tienen limitaciones en cuanto al importe máximo de aportaciones anuales y también en cuanto a la edad de jubilación para poder rescatar el dinero de forma ventajosa fiscalmente.
Además, es importante tener en cuenta que existen determinados gastos relacionados con los seguros de vida que pueden ser deducibles en el IRPF, siempre y cuando estén relacionados con la obtención y mantenimiento de los ingresos. Por ejemplo, si se contrata un seguro de vida vinculado a una hipoteca para garantizar el pago de la misma en caso de fallecimiento del asegurado, se puede deducir en el IRPF el importe de las primas pagadas.