La casilla 55 es una de las muchas casillas que se encuentran en la declaración del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) de España. Esta casilla se refiere a los rendimientos del trabajo, es decir, los ingresos obtenidos por un contribuyente a través de su actividad laboral.
En esta casilla se deben incluir todos los ingresos obtenidos a lo largo del año fiscal, incluyendo aquellos que no hayan sido sometidos a retención en origen, como los ingresos procedentes de trabajos esporádicos o remuneraciones en el extranjero.