ingresos integros integramente computables
Entre los ingresos que forman parte de los integros integramente computables se encuentran los salarios y sueldos, las retribuciones en especie (como viviendas o vehículos proporcionados por la empresa), las gratificaciones, los honorarios profesionales, así como cualquier otro tipo de remuneración obtenida por la prestación de servicios.
En resumen, los ingresos integros integramente computables son todos aquellos que se obtienen durante el año fiscal y que no están exentos por la ley, por lo que deben ser declarados y ser objeto de tributación en la declaración de la renta. Es importante tener en cuenta que existen ciertos límites y deducciones que pueden aplicarse a estos ingresos para reducir la base imponible y, por lo tanto, el importe del impuesto a pagar.