Desafectacion Fiscal
La desafectación fiscal se puede aplicar a diferentes tipos de impuestos, como por ejemplo el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) o el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). En el caso del IRPF, la desafectación se refiere a aquellos bienes o actividades que no generan renta y, por lo tanto, no están incluidos en la base imponible del impuesto.
Algunos ejemplos de bienes o actividades que pueden estar desafectados fiscalmente son las donaciones a entidades sin ánimo de lucro, las actividades agrícolas o las subvenciones recibidas por empresas. En estos casos, la desafectación fiscal permite que estas operaciones queden excluidas del cálculo de impuestos, lo que supone un incentivo para promover su desarrollo.