La Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) es el organismo encargado de la gestión, inspección y recaudación de los impuestos en España, entre los que se encuentra el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). En este contexto, la amortización fiscal es un concepto clave en la declaración de la renta, ya que permite deducir fiscalmente una parte del valor de los bienes afectos a una actividad económica, como pueden ser los equipos informáticos, los vehículos o las maquinarias.
Además, en 2012 también se introdujeron medidas para incentivar la inversión y la reactivación de la economía, entre las que se encuentra la posibilidad de aplicar una deducción adicional del 10% para los bienes nuevos adquiridos entre el 12 de mayo de 2012 y el 31 de diciembre de 2015. Esta deducción se suma a la que ya existía del 5%, lo que supone una reducción del 15% del valor de los bienes adquiridos.