El PP impedirá la regularización de inmigrantes por arraigo social

El Partido Popular (PP), en una reciente reunión de su Comité Ejecutivo Nacional, decidió impedir la regularización de inmigrantes por arraigo social en España. Esta medida ha generado controversia y críticas por parte de otros partidos políticos y organizaciones sociales. La regularización por arraigo social es una vía que permite a los inmigrantes sin documentos regularizar su situación en España, siempre y cuando cumplan ciertos requisitos como tener un trabajo estable y demostrar que llevan un tiempo viviendo en el país. Sin embargo, el PP considera que esta medida fomenta la inmigración irregular y supone un «efecto llamada» para otros inmigrantes. Para el PP, su objetivo es controlar la inmigración y evitar que se convierta en un problema social. Sin embargo, para muchos colectivos, esta medida viola los derechos humanos y vulnera la legislación internacional sobre migración. Además, se estima que la regularización por arraigo beneficia a cerca de 40.000 personas al año y genera una importante contribución económica al país. Por lo tanto, la decisión del PP ha sido cuestionada y se espera que haya una respuesta por parte de otras entidades en defensa de los derechos de los inmigrantes en España.

Tal vez el titular sea bastante sensacionalista y no del todo cierto pero si parece ser verdad que las política del PP en Inmigración pondrá el foco y el control en la regularización de inmigrantes por arraigo social.

Los inmigrantes que llevan tres años viviendo en España tienen opción a regularizar su situación. Con el PP en el poder, no podrán hacerlo si su situación en el país era ilegal, por más que, como permite ahora la ley, puedan acreditar su arraigo social, tras residir tres años, y tengan un contrato de trabajo en el momento de solicitar legalizar su estancia.

Tendremos que esperar a que el PP tome el poder y articule mediante la reforma de los artículos 123 a 130 del Reglamento, en vigor desde el pasado junio, que desarrolla la Ley de Extranjería, de 2009.

Según apuntaba el programa del PP en materia de inmigración, la intención es implementar una regularización ordenada y vinculada de la mayor forma posible al empleo.